Hoy por la mañana hemos ido con las monitoras y profesores a
una preciosa ruta…un tanto dura. La primera parte de esta ruta ha sido, para
nosotros, la más cansada. Hemos subido hasta unos 1400 m de altitud por unos
caminos muy estrechos con gran cantidad de vegetación, y también hemos tenido que pasar por pequeños
tramos de barro y agua.
A lo largo del recorrido íbamos haciendo paradas donde las monitoras
de Búbal nos daban gran cantidad de información sobre el medio. Uno de los
aspectos del paisaje que más nos han gustado han sido los valles en U formados
por glaciares. Hubo una parte del trayecto llana, pero nuestra felicidad duró
poco… a los diez minutos de caminar comenzamos a descender la montaña por
muchos caminos aun peores que los anteriores. Aun así, fue menos cansado que el
trayecto de subida. Durante la bajada pudimos recordar distintas anécdotas
como, por ejemplo, caídas por los caminos e incluso al río. Nos ha gustado
mucho esta experiencia pese a que hemos tardado unas cuatro horas en realizar
todo el trayecto.
Después de comer comenzamos con el “Proyecto del Centro”. En
este tiempo escribimos una historia de terror para contársela mañana por la
noche a los demás compañeros. También hemos escrito este diario para el blog y que
podáis conocer nuestras experiencias. A las seis y media, tras la merienda,
vamos a realizar una serie de juegos tradicionales aragoneses con los
monitores. A continuación visitaremos el museo de Búbal para conocer como eran
antes este pueblo y sus tradiciones.
Cuando acabemos de cenar nos reuniremos todos en una pequeña
sala con chimenea para relatar una historia de miedo. Hoy les toca al grupo de
Marta. Diego, Alex, Carlos y Paula.
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